La exigencia del PSC y de Junts per Catalunya de asignar partidas a ideas como el complejo turístico Hard Rock de Vila-Seca y Salou (Tarragona) o la ampliación del campo de aviación de Barcelona-El Prat como condición para respaldar los capitales de la Generalitat de 2023 ha provocado la indignación de entidades ecologistas, al estimar que proyectos de este estilo son «dañinos para el medioambiente».
De este modo lo expresó este martes Ecologistes de Catalunya, que no duda en calificar esta demanda como «un chantaje ambiental. Son proposiciones de negacionismo climático y completamente irresponsables«.
La entidad carga contra el PSC por respaldar explícitamente el complejo recreativo Hard Rock –algo que no constaba en su programa electoral en las autonómicas de 2021–, la ampliación del campo de aviación barcelonés y la construcción del Cuarto Cinturón (B-40) del Vallès. Los socialistas piensan estas proyectos «proyectos escenciales» en la negociación de los capitales catalanes. Y otro tanto sucede con Junts, que asimismo supedita su acompañamiento a las cuentas a que el Govern se comprometa a llevar a cabo seguir el plan del Hard Rock.
Sostenibilidad
Ecologistes de Catalunya considera además de esto que con la presente negativa de estos 2 partidos a aprobar los capitales se están «dejando de utilizar políticas progresistas de confort en sanidad, educación y servicios sociales».
La entidad solicita a los partidos de la oposición que luchen por proyectos sostenibles para generaciones futuras y solidarios con la crisis ambiental que, recuerdan, afectan a ámbitos humanos como el Amazonas, la Antártida o el Sahel, «con crisis ambientales y humanitarias brutales por culpa del cambio climático».