El gol de Sergi Guardiola en la segunda parte decantó la balanza en pos del Cádiz (1-0) en un partido muy abierto en oposición al Rayo Vallecano, que apretó hasta el desenlace pero no ha podido batir al misión argentino Ledesma, con lo que el aparato andaluz sale provisionalmente de los puestos de descenso.

Este resultado rompe la racha efectiva del aparato madrileño fuera de casa y sostiene la inclinación local del Cádiz, que escapa de la región de descenso esperando de otros desenlaces en esta día.

Retornaban a su viejo estadio Álvaro García y Salvi Sánchez, extremos con pasado cadista que en este momento defienden los tonos de un Rayo Vallecano en el que estrenaba titularidad Raúl de Tomás. Por la parte del Cádiz, el uruguayo Brian Ocampo se cayó de la convocatoria por lesión y su lugar en el once lo ocupó Rubén Sobrino.

Procuraba el gol un Cádiz obligado por la clasificación y apretaba al Rayo, que solucionó sin inconvenientes múltiples saques de esquina en contra seguidos. No obstante, próximo estuvo de hallar mejor premio el Rayo a los veintidós minutos de juego. Tras 2 saques de esquina seguidos, Comesaña golpeó el balón de tacón y apareció De Tomás para mandarlo a la red, pero su estreno goleador fue anulado por fuera de juego.

Nuevamente De Tomás protagonizó una acción de riesgo en el momento en que, obstaculizado por Iza Carcelén cabeceó fuera un óptimo centro del costado. Se iba arriba el Rayo y padecía el Cádiz en un partido con fases de dominio visibles en su primera media hora.

Con mejor trabajo de las dos defensas sobre los asaltos transcurrió la primera mitad hasta el momento en que en los últimos minutos Sergio Camello probó fortuna con un tiro que se fue fuera por poquísimo.

Tras la reanudación, el partido ganó en intensidad y los dos equipos procuraron abiertamente el gol. Salvó el misión Dimitrievski un codo con codo en oposición al cadista Sergi Guardiola, al tiempo que Comesaña cedió su rincón por lesión a Unai López.

El carrusel de cambios continuó con los dos entrenadores tomando cautelas al sacar a futbolistas con tarjeta amarilla. En el Rayo, Trejo reemplazó a De Tomás y Pathé Ciss a Óscar. Por parte cadista entraron Lozano y Fede San Emeterio en las situaciones de Roger y Alcaraz.

Más allá de esa mayor intensidad y subida de revoluciones en los dos conjuntos, hubo que aguardar hasta el minuto 74 para poder ver un gol. Fue obra del recién fichado delantero del Cádiz Sergi Guardiola, que lo festejó con timidez y solicitó perdón a los apasionados de su viejo aparato. El ariete aprovechó un pase profundo de Espino para ganar la espalda a la defensa rayista y plantarse frente Dimitrievski, que en esta ocasión perdió la partida.

Se defendió tratando soportar el balón y recortar el ritmo el Cádiz, cuyo banquillo y afición no comprendieron el aviso de que el tiempo plus sería de nueve minutos. En ese añadido el Rayo encerró al grupo local, que una salida a la contra de Alejo provocó la segunda amonestación a Catena.

Con un hombre menos, Iraola situó al central y enorme rematador Lejeune muy adelantado, pero el Cádiz supo soportar el resultado en un partido que se prolongó por último a los 103 minutos.