La ministra de Industria, Turismo y Pequeñas y medianas empresas, Reyes Maroto, negó hace unos días que el relevo de Raül Blanco como secretario general de Industria tuviese que ver con el resultado del Perte relacionado con el vehículo eléctrico, desilusionante desde el criterio económico por el poco porcentaje de ayudas adjudicadas. No fué, de hecho, la causa eficaz si bien sí una coadyuvante. El origen del asombroso cese está en la designación de la integrante del Consejo de Ministros como aspirante a la alcaldía de La capital española por el PSOE. 

Para los socialistas, y mucho más específicamente para su líder y secretario general, Pedro Sánchez, a la sazón asimismo jefe del Ejecutivo, se había transformado en un quemacocos la decisión del cabeza de letrero para asistir a las selecciones municipales en la ciudad más importante de España. Ahora ocurrió algo semejante hace algo mucho más de año y medio, en los comicios autonómicos adelantados en la Red social de La capital de españa. 

Un candidato en frente de Almeida

Sánchez se halló con múltiples negativas, tanto en las filas de su capacitación como en personas similares al partido que sondeó para comprender su predisposición en el momento de enfrentar el reto, a la forma en que logró en la previo convocatoria electoral con el entrenador de baloncesto José Vicente Pepu Hernández

La ministra de Comercio y Turismo, Reyes Maroto, antes de enseñar su candidatura / EFE

La situación del PSOE en La capital española, donde no atraviesa exactamente por su instante de popularidad mucho más alto, y los desenlaces de las últimas investigaciones, que dan una holgada mayoría al de hoy alcalde, el habitual José Luis Martínez-Almeida, complicaron sobre forma la tarea de Sánchez. Las cantidades demoscópicas señalan aun a que los socialistas van a tener bien difícil ser la fuerza mucho más votada en la izquierda gracias a la pujanza de Mucho más La capital española, que logró reemplazar al PSOE del liderazgo de la oposición en los convocados comicios adelantados. 

Maroto, obligada

Exactamente para aquella cita, el nombre de Reyes Maroto llegó a sonar entre las elecciones si bien al final el preferido fue el presente Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, cuyo resultado tampoco piensa una aceptable carta de presentación para “vender” la oferta de presentarse a la alcaldía de la ciudad más importante por las filas socialistas. 

En el momento en que esta llegó a la ministra Maroto, su contestación fue negativa, ya que su intención era sostenerse en el Gobierno, cuando menos hasta las próxima en general, previstas para finales de 2023. Pero, en un caso así, la opción de continuar en el Consejo de Ministros, cuando menos unos meses mucho más, pasaba por admitir el ofrecimiento de Sánchez. En caso contrario, según logró comprender a Maroto, sus días en el Gobierno estarían contados. 

Y, exactamente, la evolución de los Pertes, especialmente el del vehículo eléctrico, serviría de justificación para la adopción de semejante medida. El mensaje lanzado de manera oficial por Moncloa en relación al resultado del programa fué positivo y ilusionado, poniendo en valor que las compañías (Seat y Volkswagen) mantuvieron las inversiones. No obstante, la opinión de puertas hacia adentro están mucho más cerca de la iniciativa de fracaso que de éxito. 

Críticas internas

De esta manera, el único deber que Maroto ha podido arrancar de Sánchez fue el de mantenerse el mayor tiempo viable en el Gobierno, hasta su incorporación determinante a la candidatura. Una resolución que fué criticada en distintos campos de las áreas que caen bajo el Ministerio e inclusive asimismo en el ambiente del PSOE de La capital de españa, siendo consciente de que hay bastante trabajo por realizar hasta mayo y que esa situación resulta incompatible con la dedicación de la aún ministra.

No en balde, la figura de Maroto es claramente ignota en La capital española, ya que no tiene experiencia en el segmento municipalista y que, además de esto, fué entre los integrantes del Consejo de Ministros con un perfil mucho más bajo, más allá de la importancia de los temas que trata. 

Prueba de esto fué el vídeo distribuido por el partido solamente anunciarse la candidatura en cuyos primeros segundos aparecía sobreimpresionada una pregunta: “¿Quién es Reyes Maroto?”.

Destitución cuestionada

Desde entonces se inició una revolución en un departamento que, exactamente, se ha caracterizado por todo lo opuesto, en contraste a lo sucedido con otros ministerios. Primero fue Fernando Valdés quien abandonó su puesto de secretario de Estado de Turismo por “fundamentos personales”. Días después, Raül Blanco fue cesado y designado a regentar la Fundación Escuela de Organización Industrial (EOI), enlazada al Ministerio.

La medida cayó como una bomba en distintos campos, tanto empresariales como sindicales y asimismo en los gobiernos autonómicos, con los que Blanco estuvo en persistente contacto. La mayor parte resaltan su talante, predisposición al diálogo y aptitud de trabajo. 

El campo le reconoce

En verdad, unos días antes que venciese el período para cerrar el Perte del turismo eléctrico, el asesor encargado de Seat, Wayne Griffiths, lamentaba que la situación hubiese alcanzado el límite temporal pero resaltaba el trabajo de las gestiones públicas y su actuación ordenada con el Gobierno central.

El consejero delegado de Seat, Wayne Griffiths / EFE

El asesor encargado de Seat, Wayne Griffiths / EFE

En un desayuno informativo ordenado por CEDE, Griffiths señalaba estos puntos como la clave para sostener el optimismo sobre las inversiones previstas. Es cierto que, al final, las cantidades fueron algo deslucidas. Pero cuesta tanto hallar una opinión contraria al trabajo de Raül Blanco como desvincular su relevo de la salida de Maroto del Gobierno, eso sí, por una vía diplomática.