Constantino de Grecia, el tío del Rey Felipe VI y hermano de la reina Sofía, está muerto este martes a los 82 años tras ser ingresado en estado grave en un hospital privado de Atenas, el centro Hygenia, por problemas médicos.
Según medios locales helenos, Constantino, el último rey de Grecia, ha podido haber sufrido un derrame cerebral en su hogar a sus 82 años, al paso que otros señalan a un ingreso causado por el coronavirus, si bien de momento no hay confirmación oficial de la Casa Real helena sobre su muerte.
La reina Sofía se desplazó hasta Atenas tras ayudar al último adiós del Papa Benedicto XVI. Sus hijos, que viven en el extranjero, asimismo han acompañado al monarca en sus últimos días, tal como su mujer, Ana María de Grecia.
El estado de salud del exrey heleno era muy desequilibrado ya hace múltiples años. A inicios de 2022 fue hospitalizado tras contagiarse de la COVID-19 y en el mes de diciembre de 2021 padeció un ataque isquémico mientras que estaba con su mujer en el palacio de Porto Heli.
La última aparición pública del monarca, quien disfrutaba de enorme popularidad, fue el pasado 23 de octubre, en el momento en que asistió en silla de ruedas a la boda de su hijo menor, el príncipe Philippos de Grecia con Nina Flohr.
Constantino II fue rey de Grecia desde 1964 hasta 1973, en el momento en que la monarquía fue derogada por referéndum en 1974. Un 75.6 por ciento de los helenos eligieron que deseaban una república como forma de Estado. Tras ello, estuvo un tiempo viviendo en Londres, si bien más tarde volvió a su tierra natal, según ha recordado el períodico ‘Ethnos’.
El exmonarca era hijo de Federica de Hannover y de Pablo I de Grecia, quien era hermano menor del rey Jorge II, tal como primo hermano del ahora fallecido príncipe Felipe, duque de Edimburgo, y asimismo suegro de Juan Carlos I de España.
Tras fallecer el rey Pablo I en 1964, Constantino le sucedió en el trono. Ese año se casaría con Ana María, hija menor del rey Federico IX de Dinamarca, a quien conoció siendo heredero al trono en 1959 en Copenhague a lo largo de una visita a Suecia y Noruega.
Constantino vivió sus primeros años como rey muy convulsos a causa de los altercados que reventaron en el mes de julio de 1965 tras la renuncia de George Papandreou como presidente, tal como el golpe de Estado posterior de 1967, dirigido por George Papadopoulos, quien depuso al rey y también impuso una dictadura militar.
Tras la caída de la dictadura en el mes de julio de 1974, el político Konstantinos Karamanlis regresó de su exilio en París para conformar un Gobierno. En el último mes del año del mismo año se festejó un referéndum sobre el futuro de la monarquía.