No hubo una esquina de la provincia al que no va a llegar esta tarde la magia de Sus Majestades de Oriente, en un día en el que prevalecieron las sonrisas, la ilusión y la expectación de los mucho más pequeños.
Ahora por la mañana múltiples municipios dispusieron una día particular para los pequeños, con la instalación de atracciones, juegos y talleres en espacios en el centro o circuitos cubiertos.
De este modo ocurrió, por poner un ejemplo, en la Plaza de la Iglesia de Hellín donde, tras un largo periplo por las pedanías en los días anteriores, asimismo asistieron los Reyes Magos y sus pajes para recibir cartas y saludar a jóvenes y mayores. Tras la recepción en el Municipio, comenzaron sus visitas por sitios como el Hospital, la sede de la Asociación Avance o la de los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca.
Comitiva real en Almansa. – Fotografía: Luis BoneteAhora por la tarde, se desarrolló la clásico cabalgata por las calles en el centro, que iba a terminar con el saludo real desde el balcón del Municipio, una proyección en la testera de la iglesia y un espectáculo pirotécnico.
Acompañados de música, carrozas de fantasía, conjuntos de jóvenes o figuras de los individuos mucho más populares de la animación, Sus Majestades asimismo recorrieron las primordiales vías de Almansa o La Roda. En las aceras se agolpaban cientos de pequeños, acompañados de sus familiares, que contemplaban contentos el paso de los vistosos desfiles y recogían los dulces y datos que, como es ya tradición, acostumbran a lanzarse desde las carrozas. A la conclusión del desfile rodense, los ayudantes lograron gozar del espectáculo Rock en Navidad en el Recorrido Ferial.
En muchas localidades albacetenses, a la conclusión de las procesiones, se procedió al reparto de regalos en centros sociales o auditorios. Uno fue Munera, donde Melchor, Gaspar y Baltasar asimismo cumplieron con su ofrenda de oro, incienso y mirra en la Iglesia de San Sebastián.