De la sedición a los desórdenes públicos agravados. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, movió ficha. Al filo de las diez de la noche anunciaba en La Sexta que este viernes los conjuntos socialista y podemita presentarán en el Congreso una idea para cambiar el Código Penal. Las penas pasan de los quince a los cinco años, una visión que puede ocasionar un vuelco en la situación de esos líderes y cuadros medios de ERC que aún están atentos de juicio por la organización del referéndum del 1-O.
La conclusión a vuelapluma es que Marta Rovira podría regresar a España. E inclusive Puigdemont vería muy aligerado su horizonte penal, más allá de que sobre el expresidente en fuga pesa además de esto la loseta de la malversación. Asimismo se apunta que Oriol Junqueras podría regresar a presentarse dentro de poco a unas selecciones.
No hay otro tema en el quiosco ni en los diarios digitales. La prensa editada o desarrollada en Barcelona saluda con gusto la distensión. La mesa de diálogo marcha. La discreción fué entre las claves del acuerdo para reemplazar un delito redactado en términos decimonónicos por esos desórdenes, se comprende que agravados si son realizados por cargos públicos o con medios públicos y con la intención de modificar la arquitectura institucional del Estado.
En fachada, miel sobre hojuelas para el independentismo. No es una amnistía pero es lo mucho más similar a ello que deja el marco legal. Pere Aragonès ha convocado una comparecencia a las nueve de la mañana en el salón gótico del Palau. Se comprende que va a hacer una opinión efectiva. Pero no todo es tan simple y menos aún tratándose de echar tierra al procés. He ahí el titular de apertura de Crónica Global: «La reforma de la sedición crea recelos aun en las filas de ERC y PSOE». En el sumario se aclara que «Sánchez expone con un nuevo género de penal que da munición al PP, mientras que el independentismo pide la amnistía; el acompañamiento presupuestario entre ERC y PSOE es clave, ¿pero se finiquita el ‘procés’?» El artículo es de María Jesús Cañizares y comienza de esta forma: «De las promesas a los hechos. Pedro Sánchez dió luz verde a la derogación del delito de sedición, que va a ser sustituido por un delito de desórdenes públicos agravados. Una idea que crea rechazo entre los independentistas, que la ven deficiente finalmente con la “opresión” del Estado, y más que nada, entre PP, Ciudadanos y Vox, que la interpretan como la enésima concesión de los socialistas a los “golpistas” del procés, después de los indultos concedidos a los líderes condenados».
Prosigue la nota: «No a ERC, impulsora de una mesa de diálogo que parecía encallada, le resulta interesante esa reforma del Código Penal que difícilmente va a poder justificar frente al secesionismo mucho más recalcitrante, partidario de una amnistía que ha defendido hasta la actualidad nuestro presidente catalán Pere Aragonès. Exactamente, la palabra amnistía no hace aparición en el tweet anunciado para apreciar el aviso del Ejecutivo español. «La supresión del delito de sedición es un paso importante en la desjudicialización. Seguimos haciendo un trabajo para finiquitar totalmente con la opresión y poder votar en un referéndum. Para solucionar el enfrentamiento político y la independencia».
En El Planeta acentúan la maniobra procedimental para eludir la fiscalización del Consejo de Estado y del Consejo General del Poder Judicial. Redacta Raúl Piña: «El Gobierno lanza la reforma del Código Penal para remover el delito de sedición. La iniciativa va a ser registrada este viernes por el PSOE y Unidas Tenemos la posibilidad de en el Congreso de los Miembros del congreso de los diputados como proposición de ley. Un trámite, llevarlo a cabo desde las Cortes y no desde el Consejo de Ministros, que deja al Ejecutivo sortear la solicitud de reportes preceptivos a órganos consultivos como el Consejo de Estado o el Consejo General del Poder Judicial. Regatea frenos u objeciones. El artículo de esta iniciativa expone derogar el delito de sedición y reemplazarlo por «una exclusiva tipología» que sería «desórdenes públicos agravados»».
Portada de ‘El Planeta’ de 11 de noviembre de 2022 / KIOSKO.NET
Líneas después, Piña repara en las secuelas del trámite en el contexto de la campaña electoral persistente: «Entre los propósitos de publicar en este momento esta medida es asimismo amortiguar ese viable desgaste con un colchón de meses por enfrente en relación a las selecciones municipales y autonómicas de 2023. «Debemos proseguir caminando», dijo Sánchez en una entrevista en La Sexta. «Mañana [por este viernes] los conjuntos parlamentarios de PSOE y Unidas Tenemos la posibilidad de vamos a enseñarte una idea legislativa para reformar el delito de sedición y sustituirlo por otro homologable al que tienen otras democracias como la alemana, la francesa, la italiana, la belga o la suiza», ha defendido».
La oposición puso el grito en el cielo, según se recopila en el Abc. El artículo viene con la firma de P. Romero, quien redacta: ««El presidente del Gobierno ha podido confirmar el día de hoy que el Código Penal de este país es la moneda de cambio del independentismo para hacer más simple su permanencia en el Palacio de la Moncloa un año mucho más», aseguran fuentes del PP. Para los populares, las leyes españolas «no tienen la posibilidad de redactarse en la sede del ERC» bajo conveniencia de Sánchez. En esta línea, aseguran que ni la Constitución ni el Estado de Derecho tienen la posibilidad de rendirse a las pretensiones de ningún dirigente político «y menos de esos que se levantaron contra nuestra nación»».

Portada de ‘Abc’ de 11 de noviembre de 2022 / KIOSKO.NET
Asimismo reaccionó Vox. De exactamente la misma crónica abecedaria: «El PP no fué el único partido que se ha manifestado contra la anulación de la sedición por la vía rápida y sin los órganos consultivos. El recién nombrado secretario general de Vox, Ignacio Garriga, ha proclamado en comunidades que «no hay mayor traidor que Pedro Sánchez». Además, ha advertido que «la historia le juzgará por este motivo«, mientras que ellos [Vox] defienden España. Mucho más conciso si cabe fué el líder de la capacitación, Santiago Abascal, con un fácil y claro «traidor» en su cuenta de Twitter».
En exactamente el mismo Twitter ha reaccionado Puigdemont, quien como era de aguardar pone quejas y impedimentos. «El president Sánchez i la vicepresidenta Díaz parlen de reformar el delicte de sedició. Alguns ho festejen i ho venen com si fos la derogació del delicte. Però no és el mateix. El delicte no es deroga: se li canvia el nom i s’comunica una rebaixa de penes. Alarma», apunta en su cuenta de la comunidad.
En La Vanguardia aprueban editorialmente el paso de Sánchez y resaltan que «ERC ve acreditada su estrategia de diálogo con la supresión del delito de sedición». El artículo es de Àlex Tort: «El silencio es oro. El Govern y Esquerra fueron muy cautelosos y fueron con bastante tiento en el momento de pronunciarse sobre cualquier avance y concreción en la vía de la desjudicialización. El delito de sedición tiene, parece ser, los días contados. La máxima fué la discreción. Aun a veces hicieron mutis, especialmente cuando mucho más se ha especulado sobre ello. El día de hoy ahora tienen la posibilidad de alardear de su estrategia y contestar a las bofetadas a mano abierta del resto del independentismo, que le han reprochado hasta este día los pocos desenlaces de la mesa de diálogo. Si nada se tuerce, la derogación del delito de sedición, más allá de ser en lugar de un delito agravado de desórdenes públicos, que va a entrar a trámite este viernes por la mañana, es la piedra angular de los adelantos en “materia antirrepresiva”. Y quién sabe si es solo la primera de las piedras».

Portada de ‘La Vanguardia’ de 11 de noviembre de 2022 / KIOSKO.NET
Prosigue la nota: «Ni los indultos ni la rebajas de las fianzas del Tribunal de Cuentas a treinta ex- altos cargos de la Generalitat fueron reconocidos públicamente como frutos de la negociación con la Moncloa. En este momento, con la posible supresión de la sedición ERC tiene un razonamiento a utilizar. No es poco cosa, tanto en sentido judicial como políticamente, ya que puede salir reforzada. Al Gobierno se le abren completamente las puertas de los capitales en general. Pero que caiga este delito no basta para ERC. Tampoco para la proporción de cargos y acusados por otros delitos, como la malversación. Este último perjudica a Carles Puigdemont, pero asimismo a los republicanos Josep Maria Jové y Lluís Salvadó, considerados arquitectos del referéndum del 2017. Únicamente una reforma en este delito aliviaría su situación procesal. Del mismo modo, hay una multitud de participantes de la manifestación acusados de desórdenes públicos. Va a ser preciso ver si existe alguna solución. Esquerra procurará algo mucho más, pero en este momento la satisfacción es visible. Y mucho más en el momento en que desde sus filas admiten que se han sentido solos, con Junts y la CUP negando la mesa de diálogo y apostando de manera directa por la confrontación con el Estado».
Mucho más novedades sobre política catalana. La señora Laura Borràs y su letrado Gonzalo Boye defienden la contratación del ultraderechista Emilio (en este momento Luis Enrique) Hellín, culpado por el rapto y asesinato de la estudiante Yolanda González en 1980. El tipo se recicló en perito informático y en este momento es quien sosten que los correos que detallan los trapicheos de Borràs en la Institució de les Lletres Catalanes se consiguieron sin aval judicial y no hubo cadena de custodia. En las transmisoras catalanas se preguntan si es acertado tener la aportación de Hellín. No dicen nada, en cambio, de que nuestro Boye pasó seis años en la prisión por ayudar con ETA en el rapto de Emiliano Revilla.
Caso Dalmases. El diputado Cuevillas pide que se le reprenda por una «falta suave» (aquello de abroncar a la subdirectora del Preguntes Freqüents). Nada de multas económicas, ya que.
Cambio de tercio. Marlaska soporta la presión por la catástrofe de Melilla sostenido por nuestro Pedro Sánchez. De este modo lo cuenta Juanma Romero en El Sin dependencia: «Fernando Grande-Marlaska ha atravesado ahora incontables crisis desde su ascenso como ministro del Interior en el primer mes del verano de 2018. Desde los distintos capítulos emigratorios hasta la destitución del coronel Diego Pérez de los Cobos –avalada por el momento por la Audiencia Nacional, si bien falta por saber la sentencia del Supremo–. Pero en este momento la tierra regresa a tremer bajo sus pies. Poderosamente. Por la catástrofe en Melilla del pasado 24 de junio, en el momento en que fallecieron por lo menos 23 inmigrantes al intentar entrar por el puesto fronterizo de Vecindario Chino. La fiscalía sostiene abiertas las diligencias y el cerco político se angosta sobre él, con la amenaza de que el Congreso impulse una comisión de investigación para estudiar qué ocurrió en aquellas horas críticas».

Portada de ‘El Sin dependencia’ de 11 de noviembre de 2022
Y: «Pero Pedro Sánchez no lo dejará caer. No entra en sus proyectos, por lo menos por el momento. Él lo ha conformado públicamente con ahínco. La última vez, este jueves en un reportaje con el periodista Antonio García Ferreras en La Sexta. Fue rotundo: «No» lo cesará y sostiene «completamente» su seguridad en él. Pero el ministro asimismo tiene el acompañamiento cerrado sus compañeros socialistas del Gabinete, como han venido apuntando públicamente y, más que nada, como expresan en privado. Y no piensan que resulte posible una eventual imputación de Marlaska. No ven ese ámbito. «No hay tema», zanjan con rotundidad en la Moncloa».
Sociedad. Malas novedades en materia sanitaria. «La atención principal colapsa y pone la puntilla a un modelo sanitario fatigado», afirma El Confidencial en su apertura. En el cuerpo de sumarios se advierte de que «El sistema está al máximo aquejado por la jubilación de expertos y la carencia de médicos por los bajos salarios» y que «La huelga de La capital española, foco de la crisis, se reitera en Cantabria y se barrunta en Navarra y Aragón». Redacta Carlos Rocha: «Las costuras de la sanidad pública han saltado por la atención principal. El foco está en la Red social de La capital española, donde la reorganización de las emergencias extrahospitalarias ha causado un seísmo, pero varios de los inconvenientes de los centros de salud son recurrentes a los ambulatorios y consultorios de todo el país. La jubilación de los expertos que armaron el sistema, allí por los años 80, se une a la carencia de médicos, en tanto que varios buscaron fuera de España mejores condiciones laborales. Y a ese coctel hay que agregar el envejecimiento de la población y la necesidad de reformar un modelo que daba signos de agotamiento antes de la pandemia y que el día de hoy está a puntito de reventar».

Portada de ‘El Confidencial’ de 11 de noviembre de 2022
11 de noviembre, santoral: Martín de Tours, Bartolomé el joven de Rossano, Bertuino de Malonne. Católico, monje y mártir, Juan el limosnero, Marina de Omura, Menas de Egipto, Menas el solitario, Teodoro Estudita, Toribio de Cantabria y Verano de Vence.