El presidente de Castilla-La Mácula, Emiliano García-Page, ha recalcado, a lo largo del clásico mensaje de Año Nuevo, que en Castilla-La Mácula “somos una garantía de que el día de mañana, en frente de muchas aventuras, en el momento en que haya que charlar de España, de los derechos de las y los ciudadanos de mi tierra, vamos a hablar todos”.

«No se tienen la posibilidad de llevar a cabo trampas»

A juicio del presidente regional, “no hay otro sendero y aquí no se tienen la posibilidad de realizar trampas” y, por este motivo, ha insistido en que hablamos de una “determinación que poseemos en esta tierra”, que se contrapone con las reacciones de quienes “pierden el tiempo de forma permanente observando lo que son”.

Para el presidente regional, “nosotros lo poseemos claro, no contamos complejo de identidad y estamos contentos de esto”, fundamento por el que ha reafirmado su intención de “dejarse la piel” en el momento de proteger los intereses de la ciudadanía castellanomanchega, “en nuestras competencias, pero asimismo en el grupo del Estado”, ha señalado.

«Castilla-La Mácula, la envidia de parte importante del país»

Page ha apuntado las tres causas que sostienen una previsibilidad regional “que es la envidia de parte importante del país”: estabilidad a nivel político, una manera caracteristica de llevar a cabo las cosas y el orgullo de entender “lo que somos” en Castilla-La Mácula.

En opinión del jefe del Ejecutivo autonómico, la estabilidad a nivel político de la zona “nos deja, mediante un extenso consenso político, que lo que mencionamos se logre llevar a cabo”. Que haya un Gobierno y unas instituciones “que funcionen con normalidad en estos instantes que corren”, contribuye a que se logre hacer empleo, a que las compañías “sepan dónde tienen la posibilidad de invertir” y a ser “mucho más congruente, por el hecho de que se puede cumplir bastante superior lo que dicen”, ha asegurado.

«Entendemos lo que somos y nos encontramos contentos: somos españoles»

Para el presidente regional, considerable es asimismo el tiempo “de enorme comprensión popular” que vive Castilla-La Mácula, donde “las considerables tácticas están pactadas con hombres de negocios y sindicatos”, ya que “es bastante superior seguir juntos que tomar delanteras que dejan a muchas personas fuera o a un lado. No tiene que ver con pactar en el momento en que se precisa, sino más bien de pactar por sistema, de hablar”, ha reivindicado.

En tercer rincón, ha insistido en que “nosotros entendemos lo que somos y nos encontramos contentos con esto. Somos españoles y, en España, poseemos la autonomía como para lograr administrar los intereses que mucho más nos afectan. Aquí sí se puede decir que lo que es bueno para Castilla-La Mácula, lo es para España, y lo que es bueno para el grupo de España, precisamente lo es para nosotros asimismo”, ha sentenciado Page.

El temor al Covid de hace un año

A lo largo de su intervención, el presidente regional se ha referido a la Navidad vivida hace un año, “en el momento en que estábamos en la mitad de muchas restricciones y condicionantes, y con bastante temor por la Covid”. Por este motivo, ha reiterado que “el más destacable homenaje que tenemos la posibilidad de llevar a cabo, el mucho más contundente”, a todas y cada una la gente que se nos fueron con la pandemia, y a los una cantidad enorme de expertos “que se dejaron la piel para ofrecerle la vuelta al Covid”, es continuar capitalizando, poco a poco más, en sanidad y también investigación.

Page asimismo tuvo expresiones de recuerdo para el pueblo ucraniano, que está tolerando “una gran injusticia” con la guerra “alocada” de Putin, y ha señalado que Occidente vive las secuelas de una intervención económica, pero no militar, en este enfrentamiento.

El jefe del Ejecutivo castellano-manchego no ha amado finalizar su mensaje sin querer un feliz año 2023 a todos los vecinos y vecinas de la zona, a quienes ha garantizado que “nos marchamos a conducir con bastante sentido, con mucha moderación y con mucha determinación” para enfrentar cualquier crisis que logre venir, a través de una “medicina” que no se aplicó anteriormente, “mucho más sanidad, mucho más educación, mucho más posibilidades sociales y mucho más alma”, ha apostillado.